Hacer crecer mi empresa: el propósito de Año Nuevo
27 de diciembre de 2017Profesionalizar el negocio, coger el timón de la empresa
11 de enero de 2018Hoy hablaremos de los objetivos empresariales. Este es un tema que hemos tratado en otras ocasiones, (como en este post).
Uno de los principales propósitos del empresario es hacer crecer la empresa de forma organizada, sin perder personalización, cogiendo el volante del negocio y dedicando menos horas de trabajo. Recordad que terminamos definiendo nuestras expectativas sobre lo que ya tenemos y queremos, lo que tenemos y no queremos, lo que no tenemos y queremos y lo que no tenemos y tampoco queremos. Éste es el punto de partida.
Continuamos pues, por el deseo que dice «de forma organizada, sin perder personalización». Es decir, no lo podemos dejar al azar, sino que hay que organizarse desde el primer día para conseguirlo.
El paso es, pues, transformar nuestros propósitos en objetivos empresariales. Objetivos que nos marquen donde queremos estar a finales de año y los pasos intermedios que tenemos que hacer para conseguirlo.
Algunas recomendaciones sobre la determinación de los objetivos empresariales
- La primera, focalizarnos. Aquí es plenamente cierto el dicho de que menos es más. Querer abarcar muchos servicios, muchos clientes diferentes, muchas zonas geográficas… implica muchos recursos en dinero y, sobre todo, en esfuerzos y tiempo. Elijamos ese producto/servicio en que realmente somos buenos, aquel segmento de clientes que lo valora y que están dispuestos a pagar por dicho producto y/o servicio. Dediquemos los recursos a fijar en la memoria del mercado que nosotros somos la empresa que necesita. No os preocupéis, una vez conseguido, podemos ampliar los servicios, la zonas geográficas… Por lo tanto, no renunciamos, sino que priorizamos.
- La segunda, trabajemos en lo que realmente somos buenos, en lo que dominamos. Sólo de esta manera podremos sobresalir respecto de la competencia. Dediquemos tiempo a analizar nuestros puntos fuertes y ver cómo los podemos aprovechar y potenciar. De este modo, al igual que en la cocina cada cocinero tiene su toque personal, cada empresa atiende a los clientes sin perder personalización.
- Y la tercera y última recomendación, los objetivos deben cumplir unas premisas básicas. Deben ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y de duración limitada, lo que técnicamente llamamos SMART. En este caso recalcaremos dos de los puntos: medibles y con fechas y duraciones concretas. La herramienta para excelencia para medir los objetivos, hacer su seguimiento y aplicar las correcciones cuando se produzcan desviaciones es el presupuesto económico.
Todas las empresas, con independencia de su tamaño, debe definir unos objetivos empresariales
¡Esto es para grandes empresas! – me diréis. Pues, no. Seguro que sabéis cuando os cuesta el teléfono, la luz, la gasolina, la Seguridad Social, y todos los gastos que tiene vuestro negocio: mirad los datos del año pasado y ya los tenéis.
¡Pero las ventas no las sé. No sabemos cuánto nos comprarán los clientes este año! – me contestaréis. Pero ¿podemos saber cuántas ventas tenemos que hacer para cubrir todos los gastos, vuestro sueldo y tener beneficio?
Por tanto, no tenemos excusa. Podemos fijar nuestros objetivos empresariales con herramientas sencillas y la información que nos da nuestro propio negocio. Podemos pensar las acciones que tenemos que hacer para conseguirlos. Podemos medirlos. Podemos hacer el seguimiento. Podemos corregir las acciones a medida que vemos los resultados. ¿Qué nos impide, pues, conseguir nuestros objetivos empresariales?
La determinación de los objetivos de empresa es un factor clave de tu negocio y debes considerar la situación actual y la fase de crecimiento en que se encuentra la empresa. Desde la consultoría te podemos ayudar a valorar la situación y determinar objetivos de negocio específicos, medibles, alcanzables, relevantes y acotados en el tiempo. Nos puedes contactar por mail, por el formulario, o bien a través de las redes sociales: Facebook, Instagram o Twitter. ¡No te quedes con dudas!